Stein am Rhein, el pueblo más lindo de Suiza

Personalmente, este fue el pueblo de suiza que me quitó el aliento. No sé si fue el aire medieval, el lago, la prolijidad, la naturaleza que lo rodea o todo junto, lo que hizo que quedara embobada y enamorada de este lugar.

El pueblo es pequeño, se recorre a pie con tranquilidad y en poco tiempo. Nosotros pasamos la noche aquí y nos encantó.

Ubicación

El pueblo se encuentra al norte de Suiza en el cantón de Schaffhausen a 55 KM de Zúrich y a escasos kilómetros del límite con Alemania. Se encuentra a la orilla del lago Constanza, exactamente donde éste se transforma en el río Rin nuevamente.

Un poco de historia

En la época de los romanos, se construyó un puente de piedra y un fuerte, para aprovechar su buena ubicación. Luego, en el año 1005 se construye por parte del rey Enrique II la abadía benedictina de San Jorge, que da al pueblo un crecimiento económico importante. Lamentablemente en la segunda guerra mundial debido a los bombardeos parte de su patrimonio quedó destruido. Aún así, su casco histórico es de los mejores conservados.

El pueblo

El pueblo es tranquilo y súper pintoresco. La atracción principal es su plaza, que cuenta con varias casas con frescos pintados en sus fachadas, la que la hace un auténtico museo. Las calles son empedradas, las casas típicas medievales con entramados de madera, y por si fuera poco a orillas del Lago con aguas transparentes que lo hacen único.

A continuación vamos a comentarles algunas de las cosas que pueden verse en esta pequeña ciudad al caminar por sus calles:

Plaza del Ayuntamiento y calle Understadt: A esta plaza van a dedicarle el mayor tiempo de la estadía, ya que hay varios edificios para apreciar. Nuestra intención no es aburrirlos con la descripción de cada uno de ellos, pero solamente decirles que se tomen el tiempo para observarlos y disfrutarlos, ya que las pinturas en ellos datan del siglo XVI. Es un lugar realmente único que te transporta a otra época. Está muy bien conservado.

Abadía de San Jorge: Si bien nosotros no lo visitamos por dentro ya que estaba cerrado, hay un claustro y un salón con pinturas que dice vale la pena verlas.

Barrio Burg: al otro lado del puente se encentra este precioso barrio donde convive lo contemporáneo con lo antiguo. El aire que se respira es de tranquilidad, algún niño jugando en la calle y unas vistas preciosas al pueblo y el lago. No dejen de perderse por sus caminitos y encontrar rincones increíbles. Podrán encontrar a la Iglesia de St. Johann auf Burg, que es el templo más antiguo del Cantón.

Castillo de Hohenklingen: en lo alto de la colina se encuentra el castillo, desde donde se tienen buenas vistas de la ciudad. No lo pudimos visitar, ya que se dice se demora un buen rato en subir.

Nuestra experiencia

El pueblo nos resultó sencillamente encantador. La paz que se siente es impresionante. Lo visitamos el 3 y 4 de enero, y estaban ya quitando los puestos del mercado navideño que se desarrolla en la plaza del ayuntamiento. Digamos que los puestos a medio desarmar supongo que le quitaron un poco del encanto de este lugar, por lo que no me imagino como debe ser en todo su esplendor, simplemente divino!

Hay varios lugarcitos para cenar y tomar la merienda. También hay varias panaderías, con unas vidrieras decoradas divinas. Nosotros decidimos merendar en un local en la plaza y fue muy acertado. El lugar era súper acogedor y tenía unas vistas hermosas.

Previo a eso quisimos ir a una taberna en Burg, pero resulta que todo el mundo dentro estaba fumando! Por suerte en nuestro país ya no se permite más eso, y tenemos que aclarar que fue en el único restaurant de Suiza que nos sucedió, pero realmente nos asombró mucho, ya no estamos acostumbrados a eso.

Espero que les sirva nuestra experiencia y por favor ayúdennos a completar la guía escribiendo en los comentarios. Gracias!